El grafiti es el resultado de pintar marcas, signos, señales, o cualquier tipo de identificación en los lugares públicos, a veces pueden tener un contenido político o social, otras demarcar zonas de bandas o grupos, pero casi siempre se le reconoce como expresión artística.
Generalmente se realiza sin el permiso del dueño del inmueble o del área.
Muchas de esas señales son apreciadas como tatuajes entre los que pertenece a esa organización informal.
Generalmente se realiza sin el permiso del dueño del inmueble o del área.
Muchas de esas señales son apreciadas como tatuajes entre los que pertenece a esa organización informal.
En el distrito de Miraflores, por más que los vecinos sean cuidadosos con sus fachadas, nunca falta alguien que dibuje un grafiti, en el momento menos pensado.
Es así que se ven en las paredes de los colegios, en las instalaciones de la misma municipalidad, en las escaleras, piso, muros, en todo lugar; marcas tan curiosas como el número “34” o “la Renken”, letras unidas como “x-cos”, “rof”, “creaw”, “exploder”, “experres”, “ra“, “bar.s”, entre otras, famosas entre las paredes miraflorinas.
Algunas se usan para fines políticos, para hacerle publicidad o insultar a un candidato.
Otras para ofrecer algún servicio, como clases de skate o realizando una expresión artística, ya sea dibujando rostros o delineándolos.